En 1950 un hombre llegó al aeropuerto de Haneda en Tokio con el pasaporte de un país inexistente llamado Taured.
Los oficiales del aeropuerto al no conocer dicho país le mostraron un mapa al hombre para que señalara la ubicación exacta y el hombre se molestó al ver que en el lugar donde estaba su país había otro país llamado Andorra, un lugar que el nunca había oído mencionar.
Entonces al hombre lo encarcelaron mientras decidían que hacer con él y le decomisaron todos sus documentos, incluyendo su pasaporte con sellos de otros países inexistentes que el hombre al parecer había visitado y hasta los papeles de unas cuentas bancos que no existían en ningún lugar del mundo.
El hombre estuvo bajo custodia toda la noche y al día siguiente no había nadie en la celda y todos sus documentos habían desaparecido de donde los tenían retenidos y no había señales de que hubiera forzado las cerraduras.
Muchos científicos expertos desde la fecha y hasta el día de hoy aducen que este caso demuestra la existencia de al menos un universo paralelo.
